El cambio climático afecta ya a las finanzas públicas de los gobiernos en el mundo, pues las lluvias y las sequías, sumadas a los fenómenos naturales, han provocado un hueco que no puede enfrentarse sino con más y más recursos económicos, advierte el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados.
En el caso de México, el total del presupuesto ejercido entre 2009 y 2011 fue de 43 mil 357 millones de pesos, lo que es superior al promedio observado entre 2002 y 2004, que fue de 12 mil 150 millones de pesos.
En el documento Cambio climático y finanzas públicas en México, el CEFP de San Lázaro refiere que los efectos climáticos en la forma de fenómenos meteorológicos extremos impactan la economía y las finanzas públicas debido a su potencial para disminuir o debilitar la capacidad productiva.
“Principalmente, mediante la afectación de los activos, ya sean materiales o humanos. En el caso de activos materiales destaca la destrucción de infraestructura como caminos, carreteras, escuelas, viviendas, muebles y enseres.
“Otros activos incluyen las cosechas y el ganado, en el caso de los recursos humanos los costos se traducen en el número de muertos y el deterioro de la salud de las personas a causa de enfermedades como malaria, dengue y cólera”, dice.
El CEFP refirió la necesidad de tener presente que el impacto climático afecta negativamente tanto a los ingresos como al gasto.
En el caso de los ingresos, la recaudación podría verse afectada por una baja en el Producto Interno Bruto, aunque no hay estimaciones oficiales sobre el tema.
“En el caso del gasto —según el estudio de CEFP— deben reconocerse dos vertientes: la que tiene que ver con el gasto vinculado a los desastres naturales asociados con el cambio climático y uno de sus objetivos principales es la reparación de daños económicos y el enfrentamiento de las contingencias sociales y de salud pública que puedan suscitarse”.
Añade que “la segunda vertiente se relaciona con la estrategia federal para la mitigación y adaptación al cambio climático y el programa de mitigación y adaptación al cambio climático. Es importante decir que el tema tiene un efecto transversal sobre el presupuesto, por lo que otros programas pertenecientes a la Secretaría del Medio Ambiente o a otras entidades o dependencias, pueden verse afectados”.
En el detalle de los recursos asignados a desastres naturales en México, evidencia que en 2003 se erogaron 2 mil 713 millones de pesos, suficientes para contrarrestar las inclemencias de los desastres naturales en el país, mientras que en 2007 se gastaron 34 mil 839 millones de pesos, y para 2010 la partida fue de 22 mil 365 millones de pesos.
“De no mitigarse el cambio climático, se espera que los fenómenos meteorológicos extremos se incrementen en México, no obstante, debido a que no existe el conocimiento preciso sobre las características, el número o la intensidad de los eventos que se presentarán, no es posible estimar el monto preciso de los recursos que hay que destinar, aunque se puede determinar que el patrón de incrementos se mantendrá”, alertó el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas.
Fuente: El Universal. 16 de Enero de 2011.